Una nueva humanidad

El rey llamó a su gran chambelán y le dijo: ordeno que sea creada una nueva humanidad; al día siguiente el rey fue decapitado.

Envuelto entre pases mágicos y calderos humeantes, el alquimista pensó, estoy formando una nueva humanidad; pasaron cien años antes de que muriera de viejo y sin conseguir su afán.

Entre el estruendo de la batalla y con la seguridad del éxito, el general en jefe alzó la voz y dijo a los miembros de su estado mayor: en estos momentos estamos haciendo que surja una nueva humanidad; un momento después, el general, el estado mayor y el cuartel general, volaron por los aires.

Después de la última batalla, de la última guerra de exterminio, el último hombre y la última mujer existentes en el planeta tierra, discuten si deben o no crear una nueva humanidad.

Carlos Cárdenas Reynaud
No. 82, Julio-Agosto 1980
Tomo XIII – Año XVI
Pág. 177