Pecado a medias

Es conveniente que las sirenas que decidan abandonar el reino de los mares para ir en pos de algún príncipe hermoso, adquieran con anticipación un par de piernas y todo lo que entre ellas debe haber.
Resulta obvio que a ningún príncipe que se jacte de ser decente le gustaría ser acusado de bestialidad a medias.

Liliana Valderrama Blum
Número 136 – 137, julio-diciembre 1997
Tomo XXIX – Año XXXIII
Pág. 25

Liliana V. Blum

Liliana V. Blum

 

Liliana V. Blum

(Durango, 1974)

Es autora de la novela breve Residuos de espanto (Ficticia Editorial, 2013), y de los libros de cuentos No me pases de largo / Don’t pass me by (Literal Publishing, 2013), Yo sé cuando expira la leche (Instituto Municipal de Cultura y Arte de Durango, 2011), El libro perdido de Heinrich Böll (Editorial Jus, 2008), The Curse of Eve and other stories (Host Publications, 2008), Vidas de catálogo (Fondo Editorial Tierra Adentro, 2007), ¿En qué se nos fue la mañana? (Instituto Tamaulipeco para la Cultura y las Artes, 2007), y La maldición de Eva (Voces de Barlovento, 2002).

Liliana está compilada en varias antologías, como Atrapadas en la madre (Alfaguara, 2006), El espejo de Beatriz (Ficticia Editorial, 2009), El crimen como una de las bellas artes (Instituto de cultura de Coahuila, 2002), Óyeme con los ojos: de Sor Juana al siglo XXI, 21 escritorias mexicanas revolucionarias, (Universidad Autónoma de Nuevo León, 2010), y Three messages and a warning : contemporary Mexican short stories of the fantastic (Small Beer Press, 2012). Es coeditora de la antología Perros de agua : nuevas voces en el sur de Tamaulipas (Editorial Porrúa-Ayuntamiento de Tampico, 2006)[1].

 

[1]Semblanza enviada por la propia Liliana vía e-mail.

Deslamparados

Los genios viajaban concediendo tres deseos a quienes frotaran sus lámparas maravillosas. Existieron, otros genios que iban por ahí sin llevar lámpara alguna. Preferían que las personas frotaran lo que mejor les pareciera.

De esta segunda clase hubo agradecidos genios que llegaban a conceder hasta cien deseos.

Liliana V. Blum
No. 133, Abril-diciembre 1996
Tomo XXVIII – Año XXXII
Pág. 25