Celos

Penélope se puso furiosa y armó el gran lío porque anoche me dormí con su esposo. Ni que fuera para tanto; estaba tan enojada que hasta me amenazó… ¡Vaya!, debería estar feliz y agradecerme que, teniendo tantos ositos de peluche, siempre lo prefiero a él.

Elisa I. L. y Jácome P
No. 42, Mayo 1970
Tomo VII – Año VI
Pág. 427