Jumping Jopling

A Scott Joplin (músico afroamericano 1868-1917)
A Margaret Avery (actriz-cantante afroamericana)

Es de noche, Margaret es de noche, negra agua, con la luna de sus dientes reflejada. Su cuerpo líquido; Mississippi quieto en algún momento.

Esta actriz de Color Púrpura te canta; igual que Joplin te toca, sólo a ti, en audición, no privada, sino íntima. Para que yo, blanca común, pueda acercarme a él, me he vestido de ella. Estamos en el Maple Leaf Club en Sedalia, Damos vueltas de carro pareja por las paredes y el techo, unas veces en una sola pareja, otras, somos parte de cuadrillas, mientras suena “La Favorita”.

El saloom-cum-casino de madera de miel, es nuestro cielo, las nubes son humo de cigarro y polvo que sale del piso. Tío Remus reencarna a San Pedro. Ritmo de copas y risotadas componen la música entre una pieza y otra; la letra: mil leyendas en la piel de cada quien. Cubre las paredes el tapiz aterciopelado de las siluetas oscuras. Las manzanas de los hombres se pierden en las caderas femeninas. Mujeres de todas las edades, a las negras les fue donado bailar siempre.

Me tiene tan sujeta a su pecho, que no sé cómo puede tocar el piano al mismo tiempo. Estoy sorprendida de la blancura redonda de sus ojos la cual no imaginé. Había imaginado su boca, su bocota cubriéndome, a pesar de ser setenta y siete años más joven que él. Soy incapaz de seguir la más simple coreografía, pero seré la pareja eterna de sus valses y rags. Compases jugueteros que me vuelven Colombina, estrella de cine, muñeca de trapo de sus burdeles. Música sureña que mece mi cuerpo en la risa, hasta dormirme a su lado, para luego despertarme con un sincopado perfecto.

Cristina Manterola
No. 125, Enero-Marzo 1993
Tomo XXII – Año XXVIII
Pág. 5